Sondra, Mickey y Ruth ingresaron juntas en la Escuela de Medicina de Castillo en el año 1968; la escuela era casi exclusivamente masculina, lo que ayudó a cimentar una amistad entre ellas que estaba destinada a prolongarse a lo largo de sus vidas. Dieciocho años más tarde, las tres se han realizado en su profesión: Sondra ha ejercido en África hasta que un desdichado accidente la hace volver temporalmente a Estados Unidos. Ruth, la más aplicada de ellas, está absorbida por su clínica especializada en métodos de fecundación en Seattle. Mickey es una prestigiosa cirujana plástica. Su reencuentro cerrará el círculo de su amistad pero, sobre todo, las hará enfrentarse con su pasado personal y les abrirá las puertas de su perfeccionamiento humano.