Había vuelto de la guerra siendo duque, pero Rafael Daughtry estaba luchando contra una fuerza más poderosa que el ejército de Napoleón: su familia. Afortunadamente, Charlotte Seavers, su amiga de la infancia, había aceptado, a regañadientes, hacer un pacto. Rafe la proporcionaría el hogar que ella había perdido y Charlotte sería la señorita de compañía de sus indisciplinadas hermanas gemelas. Sin embargo, ¿quién iba a protegerlo a él? La jovencita jovial que él recordaba se había convertido en una mujer sensual cuya belleza y secretos celosamente guardados lo obsesionaban y cautivaban. Charlotte tenía un buen motivo para recelar de los hombres, pero ¿podría él, con su chispeante seducción, hacer que cayera en la tentación?