Uno de los problemas más comunes del mundo laboral es el clima impersonal que redunda en la falta de confianza entre empleadores y empleados; un entorno frío y encorsetado, plagado de rígidas normas y jerarquías que impide que el trabajador explote su talento.
Pero este statu quo solo es inamovible en apariencia: Cómo rebelarse en la empresa moderna sin perder el puesto de trabajo nos propone pequeñas fórmulas de rebelión que, a largo plazo, van a repercutir en beneficio de ambas partes y que nos ayudarán a crear un entorno laboral más humano, eficiente y creativo.