Gracias al apoyo de un equipo de neurocientíficos, filósofos y psicólogos, Comerse el tarro acompaña el crecimiento y la evolución del cerebro desde su mismo nacimiento, todo para mostrarnos la increíble realidad que nuestra mente es capaz de reconstruir con la ayuda de los sentidos, explicándonos cómo aprendemos, decidimos y actuamos, y también cómo nos conectamos con otras personas, con otros cerebros.
Todas las experiencias de la vida contribuyen a moldear nuestro cerebro.Esperamos que la lectura de este libro contribuya a hacer del tuyo un órgano (aún) más curioso, motivado y feliz.