Gray-maikil es una adolescente que apenas ha estrenado su libertad. Todavía no ha tenido tiempo de empezar a soñar con el futuro en una Ciudad que reverencia el sexo como un arte divino; sin embargo, su destino cambiará irremediablemente una noche de primavera, cuando se convierta en testigo infortunado de un cruel asesinato. Dispuesta a sobrevivir a toda costa, la joven se verá forzada a aceptar la protección de una de las facciones que luchan por hacerse con el trono; no obstante, no tardará mucho en comprender que no puede confiar en nadie, cuando su existencia sea puesta nuevamente en el delgado límite entre la vida y la muerte.