En estas 38 cartas, la imagen de la flor y su energía abren una sintonía con el proceso sanador que está latente en cada uno.
Cada flor corresponde a un estado emocional y actúa de forma precisa y benefactora sobre la energía de la persona permitiendo darse cuenta de lo que hay en las profundidades de uno, en su interior, en su alma.
Las flores que despiertan la consciencia y sanan el alma.