Seung Sahn, el primer maestro de zen coreano en impartir sus enseñanzas en occidente, guía a sus estudiantes con kong-ans, les anima en su práctica, y les muestra el espejo nítido de su propia mente. Conocido por su prodigiosa energía contestaba personalmente cada carta dirigida a él. Contiene documentos de zen y un glosario.