Caracol Beach es una novela espléndida y terrible, un mosaico de impecable traza, donde cada situación encaja en todo un juego de sentimientos y donde nada, a fin de cuentas, es inevitable. Una novela, ganadora del Premio Alfaguara de novela 1998, que trata sobre la locura, el miedo, el perdón y la muerte.
Es un sábado del mes de junio, y Beto Milanés, emigrante de origen cubano, sale a buscar a alguien que lo mate.
Al frente de la comisaría está un sargento calvo y obeso, que ha decidido pedirle perdón a su único hijo, Mandy, un travestí que vive con un modista armenio.
El fantasma de una pianista vuela de un lado a otro, como una mariposa nocturna, tratando de salvar a su hija.
Un oscuro profesor de literatura se pasa la noche en un bar, conversando con la mujer más linda del mundo.
Los orishas africanos descienden del Olimpo y acuden a la cita son sus tambores.
Tres muchachos han ido por cerveza a un supermercado, para seguir la fiesta, y se cruzan en la autopista con el cubano que quiere una tumba.
Ha estado lloviendo, hay luna, alguien ha descerebrado a un perro contra un muro.
Caracol Beach es una tragedia griega a ritmo de rock and roll.
Una obra excepcional.