Argumento de Bildelberg: la Elite del Poder Mundial
Encuadernación: Rústica
El Club Bilderberg y la Comisión Trilateral son las organizaciones específicas de una nueva clase social, la clase capitalista transnacional. Una clase que es producto del desarrollo capitalista de los últimos cincuenta años, y que representa al capital en su forma más pura: pura acumulación, que aborrece las trabas del poder estatal y los límites geográficos y sectoriales. Una clase que tiene un altísimo nivel de conciencia de sí misma, que se traduce en una potente autonomía ideológica, cuya solidez le ha permitido ejercer una influencia determinante en las políticas públicas en los últimos decenios. El hecho de que organizaciones formadas por una minoría ínfima, procedente por lo general de unos pocos estados ricos y poderosos, hagan planes que afectan a cientos de millones de personas, discutiendo a puerta cerrada, impidiendo que se divulguen los contenidos de estas discusiones y, sobre todo, que logren influir en las decisiones de muchos países, incluidos los europeos, demuestra el carácter condicionado y en definitiva oligárquico de las llamadas «democracias occidentales».1