Este libro pretende ser la segunda parte de El Injertador de Palabras publicado en Septiembre de 2015 que tenía como subtítulo ?El vivero léxico francés?. En mi anterior libro, creí que había agotado prácticamente mi material, sin embargo a medida que seguía con mis lecturas de prensa francófona me di cuenta de que disponía de material suficiente para una segunda parte. En el anterior libro, seguí un criterio periodístico a la hora de agrupar los nuevos conceptos y sus palabras respectivas; de ahí la clasificación siguiendo criterios temáticos. En este nuevo libro, voy a clasificar los conceptos desde un punto de vista estrictamente alfabético. Sin embargo, la finalidad del libro y su elaboración siguen estructuras similares. El título se me ocurrió a partir de la renovación anual de 2015 para la edición de 2016 de los dos grandes diccionarios franceses: Petit Robert y el Larousse. Según dicho artículo, los diccionarios franceses englobarían unas 70.000 palabras, mientras el diccionario de la Academia Francesa de la lengua incluiría sólo la mitad. El diccionario de la Academia Francesa exigiría una consolidación de un término antes de su inclusión en dicho diccionario. En el comentario de dicha renovación y ampliación léxica se insistía en la importancia de constituir un banco de palabras con el objetivo de ejercer la función de reservorio para que los escritores, los periodistas y los divulgadores en general pudiesen disponer de un abanico de posibilidades para definir las nuevas realidades sociales, los nuevos objetos, las alternativas para evitar los extranjerismos. Dicho banco central de palabras estaría constituido de palabras recogidas de la prensa y de los libros publicados en la lengua francesa. Me pareció una idea interesante para aplicarla en el mundo del español: constituir un banco central de palabras a partir de dos procedimientos: por una parte términos sacados de la prensa y los libros en español; y ...