Osho pone aquí en evidencia que el arte del té es una forma de meditación, explicando mediante historias y anécdotas zen los conceptos básicos que encierra la ceremonia del té y el propósito original de cada uno de sus elementos dentro de la tradición zen. La obra incluye, además, varios ejercicios sencillos y algunas técnicas simples de meditación que desarrollan vitalidad y la sensibilidad de los sentidos, proporcionando relajación y ayudando a apreciar los simples placeres de la vida. También incluye una guía práctica que contiene las distintas variedades de té, los criterios para seleccionar una variedad u otra, una lista de los ingredientes más comunes para agregar a los tés de hierbas y sus correspondientes beneficios.
"Hay que poner lo más ínfimo en el lugar más elevado, transformar lo ordinario en extraordinario, convertir la tierra en cielo. Hay que reconciliar los extremos, de modo que no haya separación entre ellos. El Zen dice que tanto lo ordinario como lo extraordinario, tanto la tierra como el cielo, son una realidad, peroque no son dos cosas diferentes. Reconcílialos, y entonces el té deviene oración, y lo más profano se convierte en lo más sagrado. El té es el símbolo de ello." Osho