Theseus Cassio lleva cazando fantasmas desde que es capaz de empuñar la daga que heredó de su padre. Él y su madre llevan años sin permanecer mucho tiempo en una ciudad pues, aunque ella no desea que Cas siga los pasos de su padre hacia la muerte, comprende que es el único que tiene en sus manos la habilidad de acabar con esos sanguinarios fantasmas.
El próximo destino de ambos será Canadá y el objetivo de Cas ya tiene nombre: Anna vestida de sangre. Un fantasma que resultará ser muy diferente a todos a los que antes se había enfrentado. Un fantasma que cuenta ya con casi cincuenta víctimas desmembradas. Pero que, por alguna razón, a Cas le perdona la vida.