«Agradezco a Anagrama por publicar la primera novela traducida de Elizabeth Taylor, y recomiendo a Taylor como un lugar, la plaza adonde ibas a sentir pensamientos del que cruza la calle, a pensar sentimientos del que escapa de casa» (Belén Gopegui).
«El tratamiento más perverso e inteligente que se ha hecho de la creación literaria en los últimos años» (Juan A. Juristo, Diario 16).
«Enorme eficacia literaria» (J. Ernesto Ayala-Dip, El País).