Proponiendo unas pistas de búsqueda y unas obras en las que los aprendices del Arte podrán depositar su confianza, Geneviève Dubois ha llevado a cabo con este libro la misma tarea que hicieron en los pasados siglos los impresores-editores que dieron a conocer a los Adeptos que han servido de guía a los de nuestro siglo.