Argumento de 64 Tankas para Una Tarde de Verano
El sabor de las moras, la empinada calle que lleva a la casa, los muros del viejo castillo, la blanca espuma de mar azul, una puesta de sol sobre la laguna, el olor del pan recién hecho, la hora de la siesta... y otros más, son momentos que conforman esta obra poética adentrando al lector en los recuerdos de las tardes de estío; miniaturas que construyen la calidez de un verano mediterráneo en la sencillez de la poesía japonesa.1