Entrevistas a los principales políticos que abrazaron la causa
kirchnerista y abandonaron el modelo.
"Un día, estaba charlando con Alberto y apareció Néstor", cuenta
Graciela Ocaña. "Néstor me explicó cuál era la idea. Hizo un dibujo y me
dijo: acá estamos nosotros, acá están todos los factores de poder, los
militares, los sindicalistas, y acá está la gente, desparramada.
Nosotros tenemos que tratar de hacer las reformas necesarias para ir
contra estos grupos de poder, los bancos, la Justicia, etcétera, con el
apoyo popular, de la gente."
Esta es sólo una de las historias íntimas que revela Yo fui K. Más allá
de que este libro convoca por primera vez a algunos de los principales
protagonistas del kirchnerismo para que puedan manifestar qué los llevó
a abandonar el barco de Néstor y Cristina Kirchner, su mayor hallazgo
radica en mostrar cómo se construye el poder en nuestro país y cómo
viven sus propias luchas quienes están a cargo del destino de los
argentinos.
Desde las reuniones de Néstor con Eduardo Van der Kooy para arreglar la
tapa de Clarín del día siguiente, cuando todavía el diario apoyaba al
gobierno, hasta la confesión del día en que Cristina quiso renunciar, Yo
fui K logra la sinceridad brutal de Alberto Fernández, Martín Lousteau,
Roberto Lavagna, Jorge Yoma y Luis Juez, entre otros, quienes relatan la
intimidad de sus experiencias en las entrañas del poder y explican, sin
vueltas, por qué se alejaron del kirchnerismo.
Escrito con la ironía de la que son capaces dos de los creadores de la
revista Barcelona como Eduardo Blanco y Fernando Sanchez, Yo fui K es,
quizás sin proponérselo, uno de los mejores libros sobre la última
década de política argentina.