Sus inicios futbolísticos fueron en la arena de La Concha y el Antiguoko, el club de su barrio. Tras recalar en Zubieta junto a su hermano Mikel, Clemente lo cedió al Eibar, pero Toshack lo rescató para la Real, donde fue subcampeón de Liga y debutó en la Champions. En su primer año en el Liverpool de Benítez ganó la Copa de Europa, aunque cinco años después volvió a hacer las maletas para jugar, ahora sí, en el Real Madrid, donde suma, de momento, los mismos títulos que su padre en el Barça: Copa, Liga y Supercopa de España. Además, es uno de los once jugadores que ha ganado la triple corona con La Roja.
No es Balón de Oro, pero sí Tambor de Oro de San Sebastián. Ser spanish en Liverpool y vasco en Madrid explica que sea tan cosmopolita y camaleónico en su juego y sus costumbres. Este libro narra 31 años de vida y éxitos de un jugador elegante, discreto, con fútbol para rato y considerado un modelo. Un modelo de futbolista.