Los trece relatos que componen este volumen fueron escritos en el trascurso de un periodo de casi veinte años, de 1937 a 1954. A lo largo de estas páginas, el lector asiste a la evolución de un estilo y de un pensamiento que culminaría y se consagraría con la publicación, en 1952, de El hombre invisible. De este modo, como una denuncia esgrimida con crudeza y concisión, pero también con tristeza, Ellison tinta con agror la discriminación y el distanciamiento insalvable entre afroamericanos y blancos, reflejando así el carácter exclusivo de una sociedad a la que le costó, y aún le cuesta, abrirse al resto del mundo.
Norman Mailer dijo sobre Ralph Ellison...
«Su escritura era tan perfecta que nadie puede nunca olvidar la experiencia de su lectura.»