Matilda, una ambiciosa joven italiana, es contratada por una agencia de modelos y edecanes que consigue ponerla frente Artemio, gobernador corrupto y millonario de una provincia de Latinoamérica que aspira a la presidencia de su nación. Sin embargo, al poco tiempo conoce a Sergio, un escritor. Entre ellos surge una relación furtiva que cambiará la vida de la joven y la lanzará a una aventura por varios lugares del mundo, terminando en Europa, donde cambia de identidad y de destino varias veces antes de instalarse en Italia. La abuela de Matilda había sido la sirvienta de Claretta Petacci, la desafortunada amante de Mussolini; la nieta va recordando el relato que su nonna le hacía de esta historia. Las historias conducen al lector a la reflexión acerca de los íntimos deseos de autoridad absoluta de los poderosos y, a través de la narración, somos testigos de cómo, al avanzar en su empoderamiento, los humanos pierden sensibilidad y objetividad y se hacen cada vez más crueles.