Argumento de Volver a la Modernidad
Siete de las más importantes novelas mexicanas de los últimos veinte años retroceden hasta principios del siglo XX para convertir en personajes a los principales escritores y movimientos literarios de la modernidad de ese país. Deambulan por sus páginas los intelectuales del grupo Contemporáneos, Jorge Cuesta, Xavier Villaurrutia y Gilberto Owen, el estridentista Manuel Maples Arce, el autor fundacional de la poesía mexicana moderna, Ramón López Velarde, la singular y enigmática narradora Amparo Dávila e incluso el legado central de Juan Rulfo. ¿Qué significa en su conjunto esa vuelta a la modernidad mexicana?
El presente libro aborda esas siete novelas en el vertiginoso fin del siglo XX y comienzo del XXI: A pesar del oscuro silencio (1992) de Jorge Volpi, En la alcoba de un mundo (1992) de Pedro Ángel Palou, Los detectives salvajes (1998) de Roberto Bolaño, Porque parece mentira la verdad nunca se sabe (1999) de Daniel Sada, la cresta de Ilion (2002) de Cristina Rivera Garza, El testigo (2004) de Juan Villoro y Los ingrávidos (2011) de Valeria Luiselli. Junto a su viaje de regreso a la modernidad literaria, estas novelas ponen también de manifiesto la incómoda coexistencia de la literatura con lo político y lo económico en la era neoliberal. Narrar lo literario puede entenderse, también, como una hábil estrategia en el mercado global de la literatura. Los libros aquí estudiados acusan, a fin de cuentas, una marca temporal que caracteriza el cambio de siglo. Octavio Paz señaló esa condición en la poesía posterior a las vanguardias históricas: "Lo que está en entredicho, en la segunda mitad de nuestro siglo, no es la noción de arte, sino la noción de modernidad." Esta afirmación define todavía al presente de la literatura mexicana contemporánea0