La vida y la pedagogía de la maestra institucionista María Sánchez Arbós (Huesca 1889-Madrid 1976) nos ofrece, en su medio siglo de ejercicio profesional y en la vida nada fácil que le tocó vivir, aspectos esenciales de un magisterio de altura sostenido: por su gran vocación, su específica y continua formación, la amplitud de su inteligencia, una actitud generosa, siempre activa y responsable, creadora y consciente. Y todo bajo el principio pedagógico de amor y respeto al niño. Su práctica la volcó en un diario de clase (Mi Diario), espejo, modelo y la síntesis teórico-práctica en el aula. Su zenit profesional fue la dirección del Grupo Escolar ?Francisco Giner? de Madrid (1933-1936), configurando una escuela modelo aún no superada. De Dña. María se podría decir: ¡lo que puede una maestra!; y creerlo.