El fascinante mundo del cine, la narrativa y la poesía de Víctor Gaviria los jóvenes marginales en Rodrigo D. No futuro o en el libro El pelaíto que no duró nada, las niñas del Medellín nocturno en La vendedora de rosas, los narcotraficantes de Sumas y restas junto con los personajes de dos docenas de cortometrajes y varios libros de ensayo, cuentos y poesía- es desgranado en este libro singular que convoca la directora, a los actores sobrevivientes de la violencia y a los colaboradores más cercanos para narrarnos del modo más dramático posible las vidas que se encienden y apagan de inmediato como la llama de un fósforo. Este cine de la calle colombiana, con actores naturales que agonizan en la pantalla con sus pasiones, sueños, ansias y frustraciones cotidianas, es también una suprema y vibrante forma artística expresada en el lenguaje de la contemporaneidad más dolorosa, tamizada por los ojos llenos de ternura y comprensión de un cineasta y poeta.