En un mundo en el que omnipresentes ideologías regulan la relación entre los seres humanos, Salcedo Ramos apuesta por "escuchar la palabra" como método de entendimiento y como manera de fortalecer la convivencia.
Sus historias de perdedores, de bufones, de olvidados, de seres irrepetibles nos regalan una experiencia impagable: la posibilidad de entrar en una conversación amable y cercana que nos sitúa en la piel de los otros que, si bien están lejos, tras esta lectura estarán a nuestro lado para siempre.
Boxeadores de mil pelajes, contadores de chistes en velorios, indígenas "palabreros", acordeonistas furtivos, futbolistas y árbitros improbables, empresarias creyentes, comunidades que han franqueado tanto los límites que resulta casi imposible describir sus vivencias, y algunos apuntes autobiográficos dan cuerpo a este libro lleno historias, de vidas verdaderamente inolvidables.