Saludado por la crítica como un "escritor que hace soñar con la posible renovación de la novela actual", Julián Rodríguez narra diversos momentos de la vida del escritor de guías de viaje y libros de encargo que a través de sus particulares relaciones con el arte de la fotografía va desgranando su visión del mundo, de la cultura y del arte. Es un libro que recuerda a las novelas de Vila-Matas o W. G. Sebald pero con la particularidad de que brota de un narrador que asume y tiene conciencia de sus orígenes rurales y que una y otra vez vuelve a los recuerdos de este mundo ya casi desaparecido.