Ante una audiencia de más de 5.000 niños y niñas, reunidos en Tübingen, ocho profesores especializados se encargaron de responder a todas estas preguntas que, tras su aparente sencillez, esconden toda una interpretación del mundo. De un modo llano, heterodoxo y divertido, estos profesores consiguieron dar las respuestas más inteligentes y sencillas a las preguntas que siempre nos hacen los niños.