Kim acudió a ayudar al guapísimo doctor... ¡y acabó en su cama! El doctor Stuart Thorpe sabía muy bien qué hacer en caso de emergencia, pero cuidar a su sobrina de seis meses era algo muy diferente. Necesitaba ayuda, ¡y pronto! Kim Cooper, una guapísima fotógrafa de niños, era la solución perfecta... Además de ser una experta en bebés, tenía un poderoso efecto en la libido de Stuart. Kim accedió a acompañarlo a casa y ayudarlo con aquella pequeña... Pero no contaba con quedarse a pasar la noche, ni tampoco con dejarse cautivar de aquel modo por los encantos de Stuart. ¿Cómo demonios iba a mirarlo a la cara a la mañana siguiente?