La idea de este libro nace en el año 2005 por el injusto proceder de los organismos oficiales y sobre todo del Presidente del Gobierno al olvidar e ignorar a los niños de la guerra no exiliados. Este proceder se ve agravado sobre parte de estos niños, como se deduce por la carta expuesta a continuación. En estas páginas se exponen las vivencias sufridas por el autor durante la guerra y las pasadas durante los primeros años de una larga posguerra, deduciéndose por lo expuesto, que aquellas situaciones no fueron un camino de rosas. Trágicas situaciones que, principalmente pasaron más los niños de las grandes capitales al sufrir las consecuencias de los continuos bombardeos. En toda contienda, los niños son las primeras victimas y en nuestra guerra se contabilizó un importante número de ellos. Esta certeza obliga a preguntarse: ¿Por qué en España no se ha tenido en cuenta a estos niños? ¿Por qué no se han dado a conocer sus tragedias? ¿Qué razones existen para este olvido e ignorancia?