Cuatro mujeres y diez secretos.
Todos tenemos secretos. Las circunstancias hacen que unos salgan a la luz y otros permanezcan en el anonimato, ocultos en el desván de nuestras mentes, aparcados en nuestros recuerdos, escondidos en los cajones bajo la ropa interior o ahogados en una continua lucha por salir a flote. Algunos, al resurgir, producen alivio, otros deberían haber permanecido inertes bajo la tierra húmeda y nunca haber resucitado.
La verdad es lo contrario de la cobardía. La mentira es solo un germen que puede llegar a crecer hasta acabar con la amistad, el amor e incluso la propia vida.