Una excepcional primera novela que retrata la valentía de activistas alemanes que se opusieron al ascenso de Hitler desde el exilio.
En septiembre de 2001, Ruth Esemann, una anciana alemana radica en Sidney, recibe un ejemplar de I was a german de Ernst Toller junto con una serie de escritos autobiográficos en los que el dramaturgo estaba trabajando en 1939, antes de suicidarse en un hotel neoyorquino. EN ellos, un Toller atormentado evoca sus recuerdos, desde la Primera Guerra Mundial hasta la llegada de Hitlet al poder, y ante todo, evoca a Dora Fabina, la valiente y carismática activista política que fue su amante. Al hilo de estos escritos, Ruth rememora sus propios y dolorosos recuerdos y los acontecimientos que tuvieron lugar en los años de enteguerras, cuando Dora, Toller, la propia Ruth y Hans, su marido, fueron forzados a exiliarse en Londres. Allí se entregan con entusiasmo a la actividad política clandestina y dufren el engaño y las traiciones de unos tiempos difíciles en los que nada es lo que parece. Mediante dos voces narrativas que se intercalan con fluidez y alternan recuerdos y reflexiones, Anna Funder nos ofrece un sólido relato en el que se conjugan el dramatismo y el humor, las pinceladas tragicómicas y las dosis justas de hondura y emoción.