Padre-madre estoy convencida de que lo que saldrá en este poemario serán los residuos de mi memoria artística por los años y la distancia. Que el tiempo de los caramelos y palulus me queda lejos, detrás de la esquina de mis solitarios pueblo. Y además dormido en las cunetas del tiempo. Padre si que serás aquí una máscara de domingo lluvioso de noviembre.