Teucro puede leerse al menos de tres maneras: ? Como pasatiempo, disfrutando de las andanzas de un humano entre los dioses del Olimpo. ? Como una parodia de los clásicos griegos, no exenta de ironías y sarcasmos. ? Como una crítica indirecta a toda la sociedad occidental. Un joven cretense, desconforme con su vida, decide ponerse al servicio de los dioses. Vivirá innumerables aventuras y un amor casi imposible.