Tenebroso, el último vampiro mexicano, comienza a experimentar algunos síntomas desconcertantes tras sus orgías de sangre: emociones humanas como lujuria, celos, soledad, ganas de jugar futbol... y miedo a la madre Muerte. Su inmortalidad y la superioridad de su linaje están en entredicho al adquirir las características de los humanos, que han sido su alimento durante siglos. ¿Será suficiente con seguir una estricta dieta? Ante semejante tragedia, cree que tener un hijo es la mejor de las soluciones, pero Isabel Tallulah, su novia inmortal, caprichosa y enormemente rica, sólo accede a mudarse de Nueva York a la Ciudad de México cuando descubre el primer síntoma de su inexorable decadencia: una cana que dispara su reloj biológico.