La crisis económica afecta especialmente a los agentes más torpes del planeta, Mortadelo y Filemón, quienes ya tenían un sueldo tan ajustado que ahora pasa a ser ridículo.
Debido a esto, nuestros agentes favoritos se verán obligados a buscarse las más increíbles ocupaciones, desde empleados de unos lavabos públicos hasta prestar sus servicios en una funeraria, para llegar a fin de mes.