Un día, llama a la puerta de Roger Flavières un antiguo compañero de la universidad que quiere contratarlo para que investigue a su mujer. El marido no sospecha que su esposa le sea infiel, sino que teme por su vida. El motivo de su temor no puede ser más sorprendente: cree que su mujer se halla poseída por el espíritu de una antepasada que murió trágicamente ahogada. Solo ello parece poder explicar por qué su esposa pasa por momentos en los que parece estar ausente, desaparece durante horas sin decir nada y se hunde a menudo en una profunda melancolía. Es así como Flavières empieza a seguir a Madeleine, una mujer de una inusual belleza de la que no tardará en enamorarse profundamente. Situada en la Francia de entreguerras, el sorprendente desarrollo de esta novela despertó el interés de Alfred Hitchcock, que la llevó a la gran pantalla bajo el título de Vértigo, un clásico del cine negro protagonizado por James Stewart y Kim Novak.