El libro parte de la necesidad de una visión integral de aquel fenómeno, que incluya también a los responsables del mismo, habitualmente ausentes de los análisis por factores políticos y por tabúes sociales.
El repaso efectuado abarca a los responsables últimos (autoridades militares y jefes de las milicias carlista y falangista), a los ejecutores de los escuadrones de la muerte y a una extensa red de colaboradores anónimos, y contiene un análisis de las características del proceso de brutalización que afectó a ciudadanos aparentemente normales. Los rasgos de la dinámica represiva, la represión requeté y la represión falangista son estudiados de forma exhaustiva, así como la presencia en la sombra de las élites socioeconómicas navarras.
Por último, también se analizan las actitudes negacionistas y de falta de colaboración de los sublevados para con los familiares de los asesinados, al igual que los intentos de memoria inmediata y temprana desarrollados por estos últimos y por los sectores políticos que sufrieron aquella limpieza política. Cuestiones no examinadas con rigor hasta el momento, con lo que este libro abre una nueva forma de tratar a fondo la memoria de aquella atrocidad.