«Quien come pescado crudo ve la realidad con otros ojos». Así se podría resumir la filosofía que hay detrás de Sashimi blues. Japón, Murakami, Machado, el movimiento surrealista o la cultura pop son algunos de los guiños que se pueden encontrar en estos poemas eclécticos, descarnados, intimistas y espontáneos, pues es la forma en que la autora entiende la escritura.