La certera conjunción de los aspectos dogmáticos con el análisis detenido y atento de las cuestiones prácticas a través del examen de la jurisprudencia, hace que el libro resulte útil no sólo al estudioso del Derecho sancionador, sino también a todos aquellos que están encargados de su aplicación diaria o se ven afectados por ella: la Administración y sus funcionarios, los Jueces, los abogados y los propios ciudadanos.