Argumento de San Bernardo y el Espíritu Cisterciense
En esta obra, el gran conocedor de san Bernardo, que fue D. Jean Leclercq, nos hace una síntesis admirable sobre la figura del santo pasando revista a los diversos aspectos de su vida y de su obra. Dios le prodigó extraordinariamente, por lo que brilló en las áreas más diversas (teólogo y literato, artista y músico, hombre de biblia y filósofo, poeta en la Iglesia y liturgo). Pero uno de los dones más insignes que recibió fue su cualidad de escritor en la que resplandece su verdadera grandeza por la que fue maestro espiritual y doctor de la Iglesia.1