Los contextos de marginación y de exclusión social nos llevan a un quehacer teológico que no se conforma con una lectura ética de la actuación de Jesús, sino que lleva a buscar al Dios comunidad de amor implicado en la historia de los excluidos. El autor ha trabajado durante muchos años tanto en los contextos de exclusión como en la reflexión teológica sobre estos lugares de encuentro con el Dios crucificado. Indispensable para los creyentes que transitan por estos lugares y necesitan alimentar una mística del compromiso entre los excluidos.