Johansson realizó para este libro un magnífico trabajo de documentación sobre el genio ruso Nikolái Gógol y el resultado es esta novela autobiográfica en la que el mismo Gógol nos va contando cómo fue su infancia, las relaciones con sus padres y, lo más importante, cómo y por qué empezó a escribir y lo duros que fueron sus comienzos. Por fin sabremos cómo se gestó su obra maestra, Almas muertas, y conoceremos su relación con los zares y con la censura, además de acompañarlo en sus viajes por Europa.
En resumen, se trata de un divertido recorrido por la vida y obra de uno de los personajes más fascinantes y desconocidos de la Literatura Universal y por la historia de la Rusia del siglo XIX. Una joya de la literatura nórdica de los últimos años y todo un descubrimiento que, por fin, podemos disfrutar en castellano.