El inspector John Tallow acaba de sobrevivir a un tiroteo en el que ha perdido a su compañero de patrulla. En la escena del crimen hay un piso cerrado cuyo tabique ha sido perforado por una bala. Al entrar en el mismo descubre un sorprendente arsenal de armas variopintas que cubren suelos y paredes alineadas en formas extrañas. Como si escondieran un código secreto, como si se tratara de un misterioso templo de culto a las armas. Las pruebas de balística revelan que fueron usadas cada una en un asesinato no resuelto con anterioridad. Tallow siente que se encuentra ante un caso diabólico, ante un asesino en serie que lleva más de veinte años matando como un cazador solitario y conserva las armas con un objetivo inexplicable.¿Por qué las armas están extrañamente vinculadas a sus víctimas? ¿Qué rito mágico esconde el asesino con la particular ordenación de las mismas que recuerda a un ¿wampum¿ de los primitivos moradores de Manhattan? ¿Qué pretende decir y qué quiere que se recuerde?Tallow no se enfrenta a un simple asesino psicótico que parece como si actuara en dos épocas diferentes. Sus investigaciones le van a arrastrar a una peligrosa trama en la que, para su sorpresa, alcanza a alguna de las grandes fortunas de Wall Street. Tallow quiere dar caza al asesino, pero éste también a él; ha destrozado su lugar de culto. Una implacable y accidentada persecución se va a desatar por la parte más oscura de Nueva York.