Puente vasco y riojano, relicario
De un diálogo de hermano con hermano
Entre el mar y la mina y el secano
Y el vino con el tráfico portuario
Como tú, venerable viejo puente
Por sobre el Ebro y todas las fronteras
Frente a ignorancias, frente a intolerancias
¡ Si yo pudiera hermanar a la gente
Abrir caminos y acortar distancias
Ser plaza y feria, derribar barreras!