El óleo sobre lienzo Retrato de Zenobia es obra del pintor Juan
Bonafé (Lima, 1901 - Las Palmas de Gran Canaria, 1969). Bonafé conoció a
Zenobia y a Juan Ramón Jiménez, con quienes le unió una gran amistad incluso
durante el exilio del poeta. La relación entre Jiménez y Bonafé es conocida,
tanto por sus colaboraciones como por las cartas que se cruzaron, insertas en
los epistolarios de la Universidad de Río Piedras y en sus Archivos. Pertenece
a los artistas murcianos de la Generación de los 20, el «grupo de Murcia»,
junto con Pedro Flores y Ramón Gaya, los más relevantes de aquella pléyade de
artistas. La obra más destacada de Bonafé es la que tiene como tema principal
el paisaje; sin embargo, también sobresalen sus retratos. En ellos utiliza
veladuras que suavizan la pintura, aunque el dibujo es determinante. En su
estilo coexisten la concepción subjetiva de la imagen y la yuxtaposición de
los presupuestos realistas, hasta el punto de que es considerado precursor del
hiperrealismo. Profusamente ilustrado.