Una verdadera demolición de los mitos urdidos en torno a París como capital sacralizada y a las misiones llamadas "humanitarias", en este caso a la desgarrada Managua.
Este libro reúne dos relatos escritos en primera persona por Bartolomé Rivarola, redactor estrella de un diario cuya línea editorial le es completamente ajena, tal vez el álter ego del autor que más auténticamente encarna la perplejidad de una época.
En Rescate en Managua, Rivarola es enviado en 1979 a la desgarrada Managua a cubrir una operación de ayuda humanitaria junto con funcionarios y otros periodistas, en un Hércules de la Fuerza Aérea Argentina en el que ni siquiera hay que ajustarse los cinturones porque se viaja de pie en el estrecho espacio que dejan unas cajas misteriosas. ¿Acaso la misión encubre el envío de armas a Somoza?
En El pretexto de París, Rivarola realiza el sueño de caminar las calles de la ciudad de Cortázar y de Hemingway. Sin embargo, el velo del deslumbramiento es fácil de rasgar. París es un pretexto habitado por fantasmas, una ciudad que cobija a esos argentinos siempre atentos a señalarlo con el dedo por el mero hecho de vivir, escribir y amar en una Argentina atravesada por el dolor.
Disruptivo en su diseño y feroz en su registro, este libro -publicado por primera vez en 1986- denuncia lo absurdo y diabólicamente eficaz del mundo a la hora de atrapar a quienes se esfuerzan por resistirse a él.