Es un libro de estilo socrático, es decir, estamos, como en los diálogos platónicos, ante una conversación. La entrevistadora es una mujer negra, feminista, defensora del relativismo moral llamada Liberty Rawls (un recurso irónico del autor para señalar uno de los puntos del problema, la libertad transformada en libertinaje que carece de la verdad). El entrevistado, que encarna la postura del realismo moral, es un palestino árabe musulmán de nombre Isa Ben Adam. La elección de este personaje nos recuerda que el realismo no es patrimonio exclusivo de una civilización, ni de una religión, si que estamos más bien ante un patrimonio de la humanidad, pues el hombre es por naturaleza realista.