Argumento de Regreso del Exilio
Once años, cuatro meses y diecisiete días. ¿Ha sido un exilio corto? Esta no es mi agenda de entonces. He tenido un sinfín. Unas grandes, en rústica, de tapas doradas, otras pequeñas, ligeras, en papel biblia. Por las noches las palpaba a escondidas, acariciaba sus páginas como membranas. Cada vez más deprisa, más intensamente, con ansia insaciable. Por el día no me atrevía a acercarme a ellas, como si fueran propiedad ajena. Tiempo después, las repartí entre los amigos, para tu nuevo libro de poemas, les decía. A algunos, según afirmaban, les trajeron suerte. Y llegaste tú, después de once años, cuatro meses y diecisiete días. Por las mañanas, con una luz que parece excluir a la muerte, llenamos sin miedo, sencilla y naturalmente, membrana tras membrana. Siempre que paso una página escrita, Orfeo vuelve la mirada.1