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Psicología de las Masas

Autores:Le Bon, Gustave;
Categoría:Psicología
ISBN: 9788471127839
Ediciones Morata, S.L. nos ofrece Psicología de las Masas en español, disponible en nuestra tienda desde el 18 de Julio del 2014. Amplia tus conocimientos con este libro de ciencias humanas, perfectamente adaptado para todos los lectores por su cuidado contenido. Este libro cuenta con un total de 136 páginas , unas dimensiones de 24x17 cm (Revisada).
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Argumento de Psicología de las Masas

Encuadernación: Rústica
Colección: Raíces de la memoria

El autor es uno de los fundadores de la psicología social. Introdujo un tema importante como es el de la psicología del comportamiento colectivo. Las explicaciones del autor acerca de los mecanismos subyacentes a la psicología de las masas no han recibido posteriormente confirmación empírica. Su idea básica y esencial, esto es, que el individuo sufre siempre una transformación radical al estar inmerso en cualquier situación multitudinaria ha sido contundentemente invalidada por las teorías posteriores.
Si esto es así, ¿cómo justificar una nueva edición en castellano de la psicología de las masas? La respuesta más sencilla vendría a través de la justa denominación del autor como un autor "clásico" en la historia de la psicología social.
Por otra parte, algunas de sus tesis parciales han sido puestas de manifiesto, de forma harto inquietante, durante los últimos años; y entre ellas, y como simple muestra, estas dos: el potencial autoritario latente en determinadas grandes colectividades (NyE) y los procesos involucrados en los fenómenos de desindividuación y anonimato (zimbardo).
He aquí, en definitiva, una obra importante, reveladora, entre otras cosas, de cómo la ideología reaccionaria de un autor condiciona y altera profundamente el estudio de la realidad social.
Sin embargo, la lectura de estas páginas es muy aconsejable para todo aquel interesado en el estudio del comportamiento social y humano. Por todo ello, sea bienvenida esta nueva edición de la Psicología de las Masas, libro que, como escribe Kuneberg en el prólogo a la edición francesa, hay que leer con espíritu crítico, pero que finalmente es necesario leer.
Extracto del prólogo por Florencio Jiménez Burillo
0PREFACIO DEL AUTOR
PRÓLOGO A LA EDICIÓN ESPAÑOLA, por F. Jiménez Burillo
INTRODUCCIÓN. La era de las masas.
Evolución de la época actual.—Los grandes cambios de civiliza ción son consecuencia de
cambios en el pensamiento de los pue blos.—La creencia moderna en el poder de las masas.—
Transfor ma la política tradicional de los Estados.—Cómo se produce el ad venimiento de las
clases populares y cómo se ejerce su poder. Los Sindicatos.—Consecuencias forzosas del poder
de las ma sas.—No pueden desempeñar sino un papel destructivo.—Por ellas se lleva a cabo
la disolución de las civilizaciones que se han hecho demasiado viejas.—Ignorancia general de
la psicología de las masas.—Importancia del estudio de las masas para los legisla dores y los
hombres de Estado.
PRIMERA PARTE
El alma de las masas
CAPÍTULO I. Características generales de las masas. Ley psicológica de su unidad mental.
Qué es lo que constituye una masa, desde el punto de vista psico lógico.—Una aglomeración
numerosa de individuos no basta para formar una masa.—Características especiales de las masas
psico lógicas.—Orientación fija de las ideas y sentimientos de los indivi duos que las componen
y desaparición de su personalidad.—La masa está siempre dominada por el inconsciente.—
Desaparición de la vida cerebral y predominio de la vida medular.—Disminu ción de la inteligencia
y transformación completa de los senti mientos.—Los sentimientos transformados pueden ser
mejores o peores que los de los individuos que componen la masa.—La masa puede ser tan
fácilmente heroica, como criminal.
CAPÍTULO II. Sentimientos y moralidad de las masas.
1. Impulsividad, movilidad e irritabilidad de las masas.—La masa es juguete de todas las
excitaciones exteriores y refleja las incesantes variaciones de las mismas.—Los impulsos a los que obedece son lo bastante imperiosos como para que se borre el in terés personal.—En las
masas no hay nada premeditado.—Acción de la raza.—2. Sugestibilidad y credulidad de las
masas.—Su docilidad a las sugestiones.—Las imágenes evocadas en su espíri tu son tomadas
por ellas como realidades.—Por qué estas imágenes son similares en todos los individuos que
componen una ma sa.—Equiparación del sabio y del imbécil dentro de la masa. Ejemplos diversos
de las ilusiones a las que están sujetos todos los individuos de una masa.—Imposibilidad de
prestar crédito al guno al testimonio de las masas.—La unanimidad de numerosos testigos es
una de las peores pruebas que se pueden invocar para establecer un hecho.—Escaso valor
de los libros de historia.—3. Exageración y simplismo de los sentimientos de las masas.—Las
masas no conocen ni la duda ni la incertidumbre y tienden siempre a los extremos.—Sus
sentimientos son siempre excesi vos.—4. Intolerancia, autoritarismo y conservadurismo de las
ma sas.—Razones de estos sentimientos.—Servilismo de las masas ante una autoridad fuerte.—
Los instintos revolucionarios momentáneos de las masas no les impiden ser extremadamente
con servadoras.—Son instintivamente hostiles a los cambios y al progreso.—5. Moralidad de las
masas.—La moralidad de las masas puede, según las sugestiones, ser mucho más baja o mucho
más elevada que la de los individuos que las componen.—Explica ción y ejemplos.—Las masas
tienen raramente como guía el inte rés, el cual es la mayoría de las veces el móvil exclusivo del
indivi duo aislado.—Papel moralizador de las masas.
CAPÍTULO III. Ideas, razonamientos e imaginación de las masas.
1. Las ideas de las masas.—Las ideas fundamentales y las ideas accesorias.—Cómo pueden
subsistir simultáneamente ideas con tradictorias.—Transformaciones que deben experimentar
las ideas superiores para ser accesibles a las masas.—EI papel social de las ideas es
independiente de la parte de verdad que puedan con tener.—2. Los razonamientos de las
masas.—Las masas no son influenciables mediante razonamientos.—Los razonamientos de las
masas son siempre de orden muy inferior.—Las ideas que aso cian no tienen sino apariencias
de analogía o de sucesión.—3. La imaginación de las masas.—Poder de imaginación de las ma-
sas.—Piensan por imágenes y estas imágenes se suceden sin nexo alguno.—A las masas les
llama sobre todo la atención el lado ma ravilloso de las cosas.—Lo maravilloso y lo legendario
son los auténticos pilares de las civilizaciones.—La imaginación popular ha sido siempre la
base de los hombres de Estado.—Cómo se pre sentan los hechos capaces de despertar la
imaginación de las ma sas.
CAPÍTULO IV. Formas religiosas que revisten todas las convicciones de las masas.
Qué es lo que constituye el sentimiento religioso.—Es indepen diente de la adoración de una
divinidad.—Sus características. Poder de las convicciones que revisten forma religiosa.—Ejem-
plos diversos.—Los dioses populares no han desaparecido jamás. Formas nuevas con las que
renacen.—Formas religiosas del ateísmo.—Importancia de estas nociones desde el punto de
vista histó rico.—La Reforma, la noche de San Bartolomé, el Terror y todos los acontecimientos
análogos son consecuencia de los sentimien tos religiosos de las masas y no de la voluntad de
individuos ais lados.
SEGUNDA PARTE
Opiniones y creencias de las masas
CAPÍTULO 1. Factores lejanos de las creencias y opiniones de las masas.
Factores preparatorios de las creencias de las masas.—La eclo sión de las creencias de las ma-
sas es consecuencia de una elabora ción anterior.—Estudio de los diversos factores de estas creen cias.— 1. La raza.—Influencia predominante que ejerce.—Re presenta las sugestiones de
los antepasados.—2. Las tradiciones.—Son la síntesis del alma de la raza.—Importancia so-
cial de las tradiciones.—Por qué tras haber sido necesarias, se convier ten en nocivas.—Las
masas son las más tenaces conservadoras de las ideas tradicionales.—3. El tiempo.—Prepara
sucesivamen te el establecimiento de las creencias y luego su destrucción. Gracias a él, el orden
puede surgir del caos.—4. Las instituciones políticas y sociales.—Idea errónea acerca de su pa-
pel.—Su influencia es sumamente débil.—Son efectos, y no causas.—Los pueblos no saben ele -
gir las mejores instituciones.—Las institucio nes son etiquetas que, bajo un mismo título, albergan
las cosas más diversas entre sí.—Cómo pueden crearse las constituciones. Necesidad de ciertas
instituciones, teóricamente malas, tales co mo la centralización, para determinados pueblos.—5.
La instruc ción y la educación.—Error de las ideas actuales acerca de la influencia de la instruc -
ción en las masas.—Indicaciones estadísti cas.—Papel demoledor de la educación latina.—Papel
que podrían ejercer la instrucción.—Ejemplos proporcionados por diversos pueblos.
CAPÍTULO II. Factores inmediatos de las opiniones de las masas.
1. Las imágenes, las palabras y las fórmulas.—Poder mágico de las palabras y las fórmulas.—
EI poder de las palabras está vincu lado a las imágenes que evocan y es independiente de
su sentido real.—Estas imágenes varían de época en época, de raza en ra za.—Deterioro de
las palabras.—Ejemplos de considerables varia ciones del sentido de algunas palabras muy
usuales.—Utilidad po lítica de bautizar con nombres nuevos cosas antiguas, cuando los
vocablos con los que se las designaba proporcionan una impre sión penosa a las masas.—
Variaciones del sentido de las palabras según la raza.—Diferentes sentidos de la palabra
democracia en Europa y en América.—2. Las ilusiones.—Su importancia.—Se las encuentra
en la base de todas las civilizaciones.—Necesidad social de las ilusiones.—Las masas
las prefieren siempre a las verdades.—3. La experiencia.—Tan sólo la experiencia puede
establecer en el alma de las masas verdades que resultan necesarias y destruir las ilusiones
que se han convertido en peligro sas.—La experiencia no actúa sino a condición de ser repetida
con frecuencia.—Lo que cuestan las experiencias necesarias para per suadir a las masas.—4.
La razón.—Su nula influencia sobre las masas.—No se actúa sobre las masas sino operando
sobre sus sentimientos inconscientes.—Papel de la lógica en la historia. Las causas secretas
de los acontecimientos inverosímiles.
CAPÍTULO III. Los conductores de masas y sus medios de persuasión.
1. Los conductores de masas.—Necesidad instintiva de todos los seres agrupados de obedecer
a un Iíder.—Psicología de los Ií deres.—Tan sólo ellos pueden crear fe y proporcionar una organi-
zación a las masas.—Forzoso despotismo de los Iíderes.—Clasifi cación de los Iíderes.—Papel
de la voluntad.—2. Medios de ac ción de los líderes: la afirmación, la repetición, el contagio.—
Papel respectivo de estos diversos factores.—Cómo puede pasar el contagio desde las capas
inferiores hasta las capas superiores de una sociedad.—Una opinión popular se convierte muy
pronto en una opinión general.—3. El prestigio.—Definición y clasifi cación del prestigio.—EI
prestigio adquirido y el prestigio perso na!.—Diversos ejemplos.—Cómo muere el prestigio.
CAPÍTULO IV. Límites de la variabilidad de las creen cias y las opiniones de las masas.
1. Las creencias fijas .—Invariabilidad de ciertas creencias ge nerales.—Son las que guían a una
civilización.—Dificultad de des arraigarlas.—Por qué la intolerancia constituye una virtud para
los pueblos.—Que una creencia general sea filosóficamente absur da no puede perjudicar a su
propagación.—2. Las opiniones móvi les de las masas.—Extrema movilidad de las opiniones que no
derivan de las creencias generales.—Variaciones aparentes de las ideas y las creencias en menos
de un siglo.—Límites reales de es tas variaciones.—Elementos sobre los que ha operado la varia-
ción.—La desaparición actual de las creencias generales y la ex trema difusión de la prensa hacen que, en la actualidad, fluctúen cada vez más las opiniones.—Cómo las opiniones de las masas
tienden, en la mayoría de los temas, a la indiferencia.—Impoten cia de los gobiernos para dirigir
a la opinión, como lo hacían an tes.—La actual fragmentación de las opiniones impide su tiranía.
TERCERA PARTE
Clasificación y descripción de las diversas categorías de masas
CAPÍTULO l. Clasificación de las masas.
Divisiones generales de las masas.—Su clasificación.—1. Masas heterogéneas.—Cómo se
diferencian.—Influencia de la ra za.—El alma de la masa es tanto más débil cuanto más fuerte es
el alma de la raza.—EI alma de la raza representa el estado de civili zación y el alma de la masa el
estado de barbarie.—2. Masas homogéneas.—División de las masas homogéneas.—Las sec tas,
las castas y las clases.
CAPÍTULO II. Las masas calificadas de criminales.
Las masas calificadas de criminales.—Una masa puede ser legalmente criminal, pero no lo es
desde el punto de vista psicológi co.—Los actos de las masas son por completo inconscientes.—
Di versos ejemplos.—Psicología de los septembristas.—Sus razona mientos, su sensibilidad, su
ferocidad y su moralidad.
CAPÍTULO III. Los jurados de las audiencias provinciales.
Los jurados.—Características generales.—La estadística muestra que sus decisiones no
dependen de su composición.—Cómo resul tan impresionados los jurados.—Escasa acción del
razonamiento.—Métodos de persuasión de abogados de los crímenes frente a los cuales los
jurados se muestran indulgentes bien severos.—Utilidad de la institución del jurado y riesgo
extremo que supondría su sustitución por magistrados.
CAPÍTULO IV. Las masas electorales.
Características generales de las masas electorales.—Cómo se las persuade.—Cualidades que
debe poseer el candidato.—Necesidad de prestigio.—Por qué los obreros y los campesinos eligen
tan ra ramente candidatos surgidos de entre ellos.—Poder de las pa labras y de las fórmulas sobre
el elector.—Aspecto general de las discusiones electorales.—Cómo se forman las opiniones del
elec tor.—Poder de los comités.—Representan la forma más temible de tiranía.—Los comités de
la Revolución Francesa.—A pesar de su escaso valor psicológico, el sufragio universal no puede
ser sustituido.—Por qué serían idénticas las votaciones, aun cuando restringiese el derecho de
sufragio a una clase limitada de ciu dadanos.—Lo que expresa el sufragio universal en todos los
paí ses.
CAPÍTULO V. Las asambleas parlamentarias.
Las masas parlamentarias presentan la mayoría de las caracterís ticas comunes a las masas
heterogéneas no anónimas.—Simplis mo de las opiniones.—Sugestibilidad y límites de la misma.—
Opi niones fijas irreductibles y opiniones móviles.—Por qué predomi na la indecisión.—Papel de
los líderes.—Razón de su prestigio. — Son los auténticos dueños de una asamblea, cuyos votos
no son, pues, sino los de una reducida minoría.—Poder absoluto que ejer cen.—Elementos de su
arte oratorio.—Las palabras y las imágenes.—Necesidad psicológica de que los líderes estén en
general convencidos y sean de luces limitadas.—Imposibilidad que tiene el orador sin prestigio
para hacer admitir sus razonamientos. Exageración de los sentimientos, buenos y malos, en las asam bleas.—Automatismo que alcanzan las asambleas en determina dos momentos.—Las
sesiones de la Convención.—Casos en los que una asamblea pierde las características de las
masas.—Influencia de los especialistas en las cuestiones técnicas.—Ventajas y ries gos del
régimen parlamentario en todos los países.—Está adapta do a las necesidades modernas, pero
da lugar al derroche finan ciero y a la progresiva restricción de todas las libertades. Conclusión.
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