Era su ayudante, no su juguete...
Jake Devila era un hombre de éxito al que las mujeres adoraban. Todas excepto su ayudante, Merlina Rossi. A Jake le encantaba provocar a Merlina y despertar la pasión que había bajo su apariencia seria y profesional. Merlina deseaba a Jake con todas sus fuerzas y su reloj biológico estaba a punto de explotar. Pero sabía que su jefe las prefería rubias y delgadas y no morenas y curvilíneas como ella... y además no le gustaban los bebés. Pero entonces surgió la oportunidad de darle una lección al jefe y demostrarle lo que se estaba perdiendo... y ella no iba a desperdiciarla.