En este libro y sesenta y cinco años después, el fundador de la Comnunidad de Taizé describe algunas etapas de su itinerario y de su reflexión.
Bajo su pluma pasan sus recuerdos de infancia y los encuentros con la madre Teresa, sus relaciones con Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II y sus visitas a los países del Este, la vida entre los desheredados de los continentes del Sur y la acogida de los jóvenes en Taizé. Y todo en un estilo meditativo y de oración, que evoca las múltiples iniciativas para construir signos de comunión y de paz, en particular en aquellos lugares en que la humanidad experimenta graves fracturas.
Libro que, sin pretenderlo, es por otra parte, el testamento vital de este hombre de Dios, cuya vida quedó trágicamente truncada el 16 de agosto de 2006 al acabar la oración de la tarde.
Este volumen se añade a los ya publicados en esta editorial: Dios solo puede amar, Las fuentes de Taizé. Amor de todo amor y Retrato de Taizé. A ellos se añadirá también muy pronto Rezar en el silencio del corazón con sus últimas oraciones y la carta inacabada para el encuentro del año 2006.