Mariano Sánchez Soler
Hace seis mil años es una obra pequeña, certera e intensa. Es una guía perfecta para saber cómo eran los que hace tantos miles de años vivían por estos pagos mucho antes de que llegáramos nosotros. Ya eran listos estos hombres primitivos cuando decidieron venir, o pasar, o quedarse instalados definitivamente en este Levante Ibérico y Mediterráneo. Eran listos porque sabían dónde se vivía bien, con un clima templado, con una tierra, seguramente, menos seca que ahora la culpa es nuestra y con un mar cálido, limpio y rico, fuente inagotable de vida y vía libre aunque incierta aún, para acercarse a los pueblos vecinos. Los restos que nos dejaron, involuntariamente unas veces piedras, trozos de las armas que usaban, vasijas, etc... y voluntariamente otras pinturas sobre todo, nos ayudan a saber casi con total seguridad, cómo vivían, cómo se desenvolvían a diario, cómo morían y hasta en qué pensaban o qué ilusiones tenían en su existencia remota. Ese es el valor fundamental de esta obra que tiene ahora entre las manos, el ayudar a conocer nuestra historia más antigua porque sólo conociendo nuestra propia historia nos podemos conocer mejor a nosotros mismos y ahí ya lo decía el padre de la filosofía griega está la raíz de cualquier sabiduria.
Manuel Avilés